*Por Prensa CEPA
En el Centro Rockefeller, ubicado en Nueva York, se coloca anualmente un gran árbol de Navidad a mediados de noviembre y se enciende en una ceremonia pública. Conocé un poco más de esta tradición en esta nota.

En el centro de la Ciudad de Manhattan, en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, se encuentra el Centro Rockefeller. En este lugar es tradición nacional, desde 1933, que a mediados de noviembre se coloque un árbol de Navidad, que se enciende en una ceremonia pública el miércoles por la noche después del Día de Acción de Gracias.

La ceremonia de iluminación se transmite en vivo desde 1997 a través de la transmisión de NBC Christmas in Rockefeller Center. El árbol es iluminado por el actual alcalde de la ciudad de Nueva York, el director ejecutivo y presidente de Tishman Speyer e invitados especiales. Más de 125 millones de personas visitan la ​atracción cada año.

Los árboles que se utilizan son donados al Centro Rockefeller, quienes luego también donan la madera. Generalmente se utiliza un abeto de Noruega de entre 21 y 30,5 metros de alto. 

People work on a Christmas tree as it arrives to the Rockefeller Center in New York, U.S. November 13, 2021. REUTERS/Eduardo Munoz

David Murbach, Gerente de la División de Jardines del Centro Rockefeller, fue el encargado hasta su muerte en 2009, de elegir con mucha pasión y dedicación los árboles de Navidad en el norte del estado de Nueva York, los estados circundantes y Canadá.

En este marco hacemos mención de una disertación académica, en septiembre de 2006, de David Murbach junto al Paisajista Ing. Agrónomo Martín Balasch, director académico del Centro de Estudios del Paisaje. Ambos dictaron una conferencia titulada “Paisajismo en movimiento – Rockefeller Center New York” en la Universidad de Mendoza.

Actualmente, Erik Pauzé es el jardinero jefe del Centro Rockefeller y es el encargado de buscar el árbol de Navidad de cada año. Junto a su equipo eligen en función de su calidez y «forma de árbol de Navidad», así como su capacidad para soportar los adornos pesados. 

Cuando el árbol se selecciona, se mueve con un remolque telescópico personalizado capaz de transportar árboles de hasta 125 pies (38 metros) de altura, aunque por la zona en que se ubica se limita la altura a 100 pies (30 metros). El de este año fue encontrado en mayo; se riega y mantiene hasta el día de su ubicación en el lugar. Según los responsables de la gestión, “tiene esa forma agradable y perfecta por todas partes, que genera instantáneamente una gran sonrisa en los rostros de todos los visitantes. Evoca un sentimiento de felicidad”.